Hace tres meses, el Ministerio de Agricultura alertó sobre
la presencia en Chile del nematodo cuarentenario de la frutilla,
Aphelenchoides fragariae, la cual fue confirmada por los
laboratorios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), dando paso a una
declaración de emergencia agrícola para contener esta enfermedad
-que se detectó en la zona centro sur- y, de esta forma, hacer más expedita
la vigilancia fitosanitaria en la zona de producción de frutillas, que incluyó la Región de Los Lagos.
Tras conocer los resultados de los primeros muestreos, la Seremi de
Agricultura, Tania Salas, informó que se corroboró la presencia de la
enfermedad en tres predios de la región, dos en la comuna de Río Negro y
uno en Llanquihue, y se estima el número podría
aumentar a medida que se hagan muestreos en más predios. “Los servicios
del Ministerio de Agricultura se encuentran trabajando, desde el primer
momento, para establecer una serie de medidas sanitarias para reducir
al máximo el impacto y la dispersión de la
plaga. Llamamos a los productores a estar atentos al comportamiento de
sus plantas de frutillas y a notificar al SAG si observan alguna
sintomatología sospechosa en sus cultivos, pedimos que se acerquen al
SAG para que los inspectores puedan tomar muestras
y realizar los análisis correspondientes y, de confirmarse la
presencia, tomen de inmediato las medidas indicadas para evitar su
diseminación”.
En esa línea, la autoridad agregó que “queremos recorrer este camino
junto a los productores, les pedimos que informen en caso de sospecha,
si un predio resulta positivo se informarán las medidas que debe tomar
para evitar que la plaga se siga propagando y
evitar mayores pérdidas
En esa línea, Carolina Giovannini, Encargada Regional de Protección
Agrícola, Forestal y Semillas del SAG, sostuvo que “este es un nemátodo,
una especie de gusano microscópico, que en el caso de la frutilla
afecta a la parte aérea. Los síntomas son malformaciones
en el follaje, daño en las hojas, necrosis y muerte de tejidos, y
finalmente afecta el rendimiento del fruto, produciendo malformaciones .
Para su diagnóstico es importante que los productores notifiquen al SAG
para que el Servicio tome una muestra y coordine
su análisis en laboratorio”.
Con
relación al nivel de pérdidas en la producción que la enfermedad pudiera
ocasionar, Giovannini sostuvo que “esa información, hasta ahora es más
bien bibliográfica, porque en el país no tenemos
antecedentes del daño que provoca, pero según la literatura podría ser
entre un 60 y 80 por ciento, cifra que corresponde a lo reportado por
otros países”.
Igualmente, se hizo un llamado a no intercambiar plantines, estolones o comprar plantas en ferias y mercados informales, sino abastecerse en viveros certificados
y previamente chequeados por el SAG.
Por su parte, Ana María Valck, jefa del Departamento de Fomento de INDAP
Los Lagos, informó que el Servicio tiene un catastro de 600 pequeños
agricultores productores de frutillas a quienes se les está informando
del impacto de esta plaga y a los que se espera
orientar para que puedan chequear sus cultivos.
Asimismo, la subdirectora de INIA Remehue, Ana María Méndez, señaló que
la entidad colocó a disposición su red de laboratorios para poder hacer
una detección rápida mediante test PCR para la detección rápida del
nemátodo, colocándose a disposición del SAG con
500 muestras mensuales por 4 meses para poder determinar qué planta
está enferma y cuál no.
Ignacio Hott, productor de frutillas de la provincia de Osorno, señaló
que “no sabemos en qué magnitud nos afectará esta plaga, eso nos tiene
muy preocupados”. Igualmente, mostró inquietud por la propagación del
nematodo al existir baja oferta de plantas de
frutillas en el mercado, lo que puede llevar a algunos a multiplicar o
intercambiar plantas enfermas. “Es una muy mala práctica, no se debe
realizar, está prohibido, los productores no somos viveristas y no
podemos correr el riego de pasarnos la enfermedad
de campo en campo”, afirmó.
Medidas
Para financiar los gastos generados por la presencia del nemátodo del enanismo de primavera de la frutilla (Aphelenchoides fragariae), el Ministerio de Agricultura anunció $1.935 millones para contener la enfermedad y beneficiar a cerca de dos mil productores
de frutillas del país, ya que la mayor parte pertenecen a la agricultura familiar campesina. E
A nivel regional, y una vez detectada la plaga en la Región de Los
Lagos, la Seremi de Agricultura junto a los servicios del agro y
representantes de los productores, conformaron una mesa técnica para
abordar medidas para evitar la dispersión del nemátodo.
Por su parte, el SAG aumentó la capacidad analítica de su red de
laboratorios y autorizó a dos laboratorios privados para apoyar en el
diagnóstico de este nemátodo. A la fecha, además, ya aprobó el uso
especial de 13 plaguicidas para controlar esta enfermedad.