Page Nav

HIDE

Grid

GRID_STYLE

AHORA

latest

Amy Coney Barrett, la jueza nominada por Trump a la Corte Suprema

A pocos días de la muerte de la célebre juez Ruth Bader Ginsburg, Donald Trump presenta su candidata a la Corte Suprema de Estados Unidos: u...

A pocos días de la muerte de la célebre juez Ruth Bader Ginsburg, Donald Trump presenta su candidata a la Corte Suprema de Estados Unidos: una mujer joven, blanca, conservadora y religiosa, características que hacen temer un retroceso en temas como aborto, homosexualidad y salud gratuita.

El presidente Donald Trump no ha esperado siquiera a que el cuerpo de la reconocida juez Ruth Bader Ginsburg sea debidamente enterrado. Tiene prisa por nombrar lo más rápido posible a una juez de tendencia derechista que ocupe la nueva vacante y logre una mayoría aplastante de conservadores -6 de 9 jueces- en la Corte Suprema de Estados Unidos.

La juez nominada por Trump este sábado se llama Amy Coney Barrett, que se presenta con un perfil ultraconservador: católica practicante y madre de siete hijos, incluidos dos adoptados de Haití y un pequeño con síndrome de Down, Barrett se opone al aborto, uno de los temas claves dentro de la polarización cultural que domina la actualidad de Estados Unidos.

Tras pasar la infancia en Nueva Orleans, en el sur conservador, se convirtió en una de las mejores estudiantes de la escuela de derecho de Notre Dame en Indiana, institución en la que enseñó durante 15 años.

Al comienzo de su carrera como abogada, trabajó como secretaria del renombrado juez conservador de la Corte Suprema Antonin Scalia y adoptó su filosofía "originalista" que entiende la Constitución tal como estaba destinada a ser leída en el momento de su redacción, en contraposición a la interpretación más progresista.

Mientras se desempeñaba como juez en la corte federal de apelaciones de Chicago, Barrett adoptó posiciones a favor del derecho a portar armas y desfavorables para los migrantes y mujeres que pretenden abortar. También mostró su oposición a la llamada Obamacare, la reforma de salud impulsada por el expresidente que los republicanos han intentado desmantelar en los últimos años.

"El Reino de Dios"

Una de sus conferencias, impartidas a estudiantes en Notre Dame, se utiliza con frecuencia para criticar a Barrett. La magistrada se presenta a sí misma como un "tipo diferente de abogada", y considera que una "carrera legal no es más que un medio para un fin...y ese fin es la construcción del reino de Dios".

Barrett y su esposo pertenecen a un un grupo cristiano pequeño denominado People of Praise, cuyos miembros hacen un juramento de lealtad de por vida. Cada uno tiene un asesor personal que les ayuda y aconseja en la toma de decisiones importantes, como pareja, sitio de residencia, trabajo e incluso cómo criar a los hijos.

A nivel político, Amy Coney Barrett cumple con las dos pruebas de fuego que exige Trump a los jueces federales: la voluntad de revocar la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (Obamacare) y revocar "Roe vs Wade", la legislación histórica que legalizó el aborto en Estados Unidos.

El nombramiento de esta juez puede representar el fin de la atención médica de 20 millones de estadounidenses. Se estima que Barrett, que incluso se ha opuesto a garantizar el acceso a la anticoncepción, sería una pesadilla para la libertad reproductiva.

Por otro lado, los conservadores saludan a una mujer que consideran "brillante" e "impresionante". En internet, sus fanáticos han comenzado a publicar memes de ella vestida como Superman.

Trump no duda de la aprobación del Senado

Trump lo dijo sin tapujos este domingo: "El Senado confirmará "fácilmente antes de las elecciones" a su nominada a la Corte Suprema Amy Coney Barrett, pese a que los demócratas se oponen a su intención de inclinar a la derecha al máximo tribunal por los próximos años.

Esto sería la violación a una regla no escrita que impide nominar a un juez de la Corte Suprema a tan sólo días de las elecciones presidenciales. Pero el mandatario se ha hecho oidos sordos con respecto a esta tradición y ha respondido simplemente que los republicanos ganaron el Senadio y están en su derecho de ejercer la votación correspondiente.

Las sesiones del Senado para refrendar la nominación de Amy Coney Barrett comenzarán el 12 de octubre y se espera que sea aprobada definitivamente a finales de mes, pocos días antes de las elecciones que se realizarán el 3 de noviembre.

 

No hay comentarios.